Los tuits que contienen enlaces maliciosos tienen mayor probabilidad de contener emociones negativas, y es que el contenido del tuit lo que aumenta la probabilidad de que guste y se comparta, según ha demostraro por primera vez investigadores de la Universidad de Cardiff.
El nuevo estudio ha sido publicado en la revista ACM Transactions on the Web.
Tuits maliciosos
Como parte del estudio, el equipo analizó una muestra aleatoria de alrededor de 275.000 de un corpus de más de 3,5 millones de tweets que se enviaron durante siete eventos deportivos importantes: la Copa Mundial de la FIFA 2014, la Superbowl 2015 y 2016, la Copa Mundial de Cricket 2015, la Copa del Mundo de Rugby 2015, la UEFA EURO 2016 y los Juegos Olímpicos de 2016.
El equipo identificó 105.642 tweets que contenían URL maliciosas y 169.178 tweets que contenían URL benignas de este conjunto de datos, y luego utilizó modelos informáticos sofisticados para estimar cómo estos tweets sobrevivieron en la plataforma 24 horas después del evento deportivo.
Los tweets que se clasificaron como benignos tenían más probabilidades de difundirse si un usuario tenía una gran cantidad de seguidores y el tweet contenía emociones positivas como "equipo", "amor", "feliz", "disfrute" y "diversión".
Sin embargo, los resultados mostraron que los tweets maliciosos no estaban fuertemente asociados con la cantidad de seguidores del cartel y era más probable que se difundieran cuando el contenido del tweet contenía emociones negativas. Los tweets que reflejaban miedo tenían un 114% más de probabilidades de ser retuiteados, con palabras como "matar", "luchar", "disparar" y "controversia" que se incluían regularmente en los tweets que contenían URL maliciosas.
Los ciberdelincuentes utilizan cada vez más este método, conocido como "ataque de descarga no autorizada", para ocultar una URL maliciosa en un tweet atractivo y usarla como cebo de clics para atraer a los usuarios a una página web maliciosa.
El estudio sugiere que los resultados muestran que incluso con las medidas de seguridad de Twitter, las URL maliciosas aún pueden pasar desapercibidas y que esta brecha es lo suficientemente grande como para exponer a millones de usuarios a malware en un corto período de tiempo.